Amos de la ciencia y de la cultura: la oligarquía norteamericana se ha convertido en guía y dueña del país.

La CIA, creada en 1947 durante el Gobierno de Harry S. Truman, es producto de la época en que el gobierno de los Estados Unidos, fuertemente dominado por los monopolios, se erigió como "líder del Mundo Libre". abanderado del Sistema Capitalista y el heredero de Imperios, al terminar la Segunda Guerra Mundial.
Las tareas de la CIA, por esa razón, consisten en ayudar a la penetración y dominio de los monopolios norteamericanos e el mundo, consolidando gobierno (gorilatos) afines a esos objetivos, y creando toda serie de dificultades a los que adoptan una política nacionalista y popular. Todo, con el pretexto de luchar en favor d la democracia y la libertad y de combatir la expansión del comunismo.

Paralelamente al dominio que ejercen sobre las actividades económicas, los grandes grupos financieros —Rockefeller, Morgan, DuPont, First National City Bank, Mellon y otros— controlan las más importantes instituciones relacionadas con la educación e investigación, las artes, atención médica, organización de la juventud, y las conectadas con la política económica, relaciones exteriores y las actividades diplomáticas y militares de los Estados Unidos. Mediante su intervención en dichas instituciones buscan influir sobre la orientación de todo tipo de actividades culturales y de acción social, con el objeto, por una parte, de preparar los cuadros profesionales y técnicos que sirvan mejor a sus intereses y de mejorar su imagen ante la opinión pública, y por la otra, asegurar una política exterior que consolide y amplíe su dominio económico en el mundo. Además, muchas de esas instituciones se manejan como negocios lucrativos.

Bastarán algunos ejemplos notorios para apreciar hasta qué grado los grupos financieros han llegado a poner bajo su influencia las actividades de la superestructura.

El Presidente Emeritus del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) es el señor Julius Stratton, que además de ser el presidente del consejo de la Fundación Ford, la más importante de los Estados Unidos, es miembro de los consejos de empresas tan importantes como la Standard Oil de Nueva Jersey, la número uno del mundo en el ramo petrolero con 19,242 millones de dólares de recursos, y de la Westinghouse Corp., con 3,358 millones.

El señor Howard Wesley Johnson, presidente del mismo MIT, es Chairman del Banco de la Reserva Federal de Boston, vicepresidente ejecutivo y consejero de la Federated Department Stores, con más de mil millones de dólares de recursos, consejero de la John Hancock Mutual Life Insurance Co., con más de 10 mil millones de dólares de activos, miembro del Comité de Desarrollo Económico y miembro del comité asesor del presidente en relaciones obrero patronales.

Joseph Irwin Miller, socio de la American Telephone & Telegraph, la mayor empresa del mundo, con recursos que alcanzan la fabulosa suma de 49,642 millones de dólares, del banco Chemical New York Trust, con 10,980 millones, de la gran compañía de seguros, Equitable Life, con 14,371 millones y presidente de la Cummins Engine Co., forma parte de los consejos directivos de dos Universidades, Yale y Butter, y de la Fundación Ford.

Thomas J. Watson, socio del importante banco Bankers Trust de Nueva York, con 9,931 millones de dólares de activos, Chairman de la IBM, líder mundial en la fabricación de computadoras, con recursos de 8,539 millones de dólares, es miembro de los consejos directivos del Instituto de Tecnología de California, de la Universidad Brown, de la Fundación Rockefeller y del Museo de Historia Natural de Nueva York.

William Hewlett, Presidente y socio de la Hewlett Packard (de la que es socio David Packard, Subsecretario de Defensa) socio también de la Chrysler Corp., una de las “tres grandes” de la industria de automóviles, con 4,816 millones de dólares de recursos, y de la Food Machinery Corp., con 1,032 millones de activos, es uno de los directivos de la importantísima organización de investigaciones Rand Corporation que ha jugado un papel tan destacado en la intervención de los Estados Unidos en Vietnam. Así mismo, Hewlett fue miembro del “Comité Asesor del Presidente para la Ayuda al Exterior”, de 1965 a 1968.

Las Embajadas

Los grandes monopolios, como era de esperarse, tienen una gran influencia directa en el servicio exterior de los Estados Unidos, posiciones que utilizan para defender sus intereses apoyados en el respaldo decidido del gobierno de los Estados Unidos. Casos ilustrativos son los siguientes:

El Embajador en la Gran Bretaña es el señor Walter H. Annenberg, socio del Penn Central Co., el sistema ferroviario más grande del mundo y cuyos recursos se elevan a 6,851 millones de dólares; accionista también del importante Banco de Filadelfia, el Girard Trust Bank, con activos de 2,522 millones de dólares, y de la empresa Campbell Soup, con 605 millones de recursos.

El embajador en la República Federal Alemana es Kenneth Rush, socio del Bankers Trust, ya mencionado, accionista de la American Sugar Co., y miembro del Comité de Relaciones Exteriores y del Comité Asesor de la Política Exterior de los Estados Unidos.

En Francia actuó como Embajador el señor Arthur Amory Houghton, de 1957 a 1961, quien forma parte del grupo financiero del First National City Bank de Nueva York, el más importante banco de Wall Street, siendo accionista también de la gran compañía de seguros, la New York Life Insurance Co., con 10,741 millones de dólares de recursos, y el principal accionista de la Corning Glass Co., la más importante en la industria del vidrio, con 573 millones de dólares de activos.

Podríamos agregar a los casos anteriores el del señor Robert Charles Hill, que fue Embajador de los Estados Unidos en México, de 1957 a 1961, y que ahora lo es en España, quien figura en los consejos de varias empresas, como la Todd Shipyards (103 millones de dólares), la Northeast Airlines de Boston (63 millones), la Canadian International Power Co., y que formaba parte del Consejo de la Monterrey Railway Light and Power Co. (México).

La Agencia Central de Inteligencia (CIA) 

La CIA, creada en 1947 durante el gobierno de Harry S. Truman, es producto de la época en que el Gobierno de los Estados Unidos, fuertemente dominado por los monopolios, se erigió como “Líder del Mundo Libre”, abanderado del sistema capitalista y el heredero de imperios, al terminar la Segunda Guerra Mundial.

Las tareas de la CIA, por esa razón, consisten en ayudar a la penetración y dominio de los monopolios norteamericanos en el mundo, consolidando gobiernos (gorilatos) afines a esos objetivos, y creando toda serie de dificultades a los que adoptan una política nacionalista y popular. Todo, con el pretexto de luchar en favor de la democracia y la libertad y de combatir la expansión del comunismo.

La esencia de las actividades de la CIA, dictada por los intereses petroleros, mineros, industriales, comerciales, bananeros, y financieros de los grandes grupos monopolistas norteamericanos, se ha hecho patente en multitud de hechos: Vietnam, punto estratégico en el sureste asiático; en Irán, cuando Mossadegh intentó nacionalizar el petróleo, por lo que fue derrocado; en Guatemala, con la ayuda a Castillo Armas para derrocar al gobierno de Arbenz y asegurar así los intereses bananeros de la United Fruit Co.; en República Dominicana, Brasil, etc.

No es de extrañar, por lo tanto, que este instrumento tan importante se encuentre fuertemente controlado por los grandes monopolios, en forma directa y a través de funcionarios que sirven sus intereses. Entre los 6 personajes que han jefaturado a la CIA, cuando menos 4 han sido importantes figuras de los círculos financieros.

Walter Bedell Smith, era socio de varias empresas importantes como la United Fruit Co., la RCA, la Corning Glass y la American Machine and Foundry. Smith fue también Jefe de Estado Mayor del presidente Eisenhower y Embajador de los Estados Unidos en la URSS.

AlIan Dulles, (hermano del extinto John Foster Dulles que fue Secretario de Estado) era socio de la importante firma Sullivan and Cromwell a la que pertenecía también su hermano John Foster.

John McCone, millonario de Los Angeles, accionista de varias grandes empresas, entre los cuales figuran la Standard Oil de California, el banco United California Bank, la Western Bancorporation y la International Telephone and Telegraph.

William Raborn, que era un Almirante retirado, figuraba como vicepresidente de la Empresa Aerojet General Corp., de Los Ángeles.

La intervención de los monopolios en el manejo de la CIA se ejerce también a través del llamado “grupo especial” que es el que fija la política a seguir (se sabe que se reúne en los sótanos de la Casa Blanca) y que está formado por cinco miembros, entre los que han figurado los siguientes: McNamara (Ford Motor), John McCone (Standard Oil, Cal.) McGeorge Bundy (ex profesor de Harvard y ahora presidente de la Fundación Ford) Roswell L. Gilpatric (Eastern Airlines, Corning Glass, Fairchild Camera, Aerospace Corp.) y U. Alexis Johnson (diplomático en Checoslovaquia, Tailandia y otros lugares).

De los datos que hemos presentado se pueden derivar dos conclusiones importantes:

1.— Los intereses monopolistas norteamericanos son los verdaderos responsables de la política belicista y de dominación mundial que sigue el gobierno de los Estados Unidos, tanto en Vietnam como en otras partes del mundo.

2.— El pueblo norteamericano ha ido tomando conciencia de que la política exterior de su gobierno y la acción de los monopolios yanquis en el mundo significa intervenir en los asuntos internos de los pueblos, mantenerlos bajo la amenaza de guerras y agresiones económicas de todo carácter, y por ese hecho ya no está dispuesto a servir de instrumento de los círculos imperialistas de su país. Esta posición del pueblo norteamericano, que cada vez se define con mayor claridad, jugará un papel de enorme importancia en la derrota del imperialismo, enemigo número uno de la Humanidad, con lo que se abrirá una era de prosperidad y de verdadera amistad y solidaridad de todos los pueblos de la Tierra.♦

Ceceña, José Luis [1971], "Amos de la ciencia y de la cultura: la oligarquía norteamericana", México, Revista Siempre!, 943: 22-23, 21 de julio.