Los monopolios controlan: los puestos clave del gabinete: Departamento de Estado, Defensa, del Tesoro; y los asesores inmediatos de la Presidencia y del Gabinete; la poderosa y siniestra CIA; las Embajadas y Misiones Especiales importantes, los Comités de relaciones económicas y políticas en el exterior. Los Grupos Financieros imperialistas de los Estados Unidos, hechos gobierno, intervienen en los asuntos internos de nuestros pueblos, organizan sabotajes, bloqueos, golpes de Estado, para dominarlos y explotarnos mejor. Pero lo que sucede dentro de los Estados Unidos y la resistencia de los pueblos ante la intervención extranjera, está mostrando ya que el dominio imperialista está llegando a su fin y con ello se vislumbra una era de progreso, independencia y Paz, en un marco de solidaridad mundial. |
La publicación de los documentos secretos sobre la intervención de los Estados Unidos en Vietnam se puede considerar como un “hecho histórico” por su gran relevancia, tanto por los datos que proporciona como porque nos revela la intensa lucha que en los propios Estados Unidos se está llevando a cabo por amplios sectores de la opinión pública en contra de los círculos imperialistas que hasta ahora han jugado con los destinos de la humanidad llevando la destrucción y la muerte por doquier, en aras de sus intereses bastardos.
De los muy diversos aspectos interesantes que presentan los documentos aludidos, deseo ocuparme de uno que considero tiene la mayor relevancia: el decisivo dominio que los círculos financieros norteamericanos tienen sobre su gobierno y sobre la política económica, política y militar en el exterior.
Los grandes grupos financieros de los Estados Unidos han controlado desde finales del siglo pasado los puestos más importantes del gabinete y de la administración, desde los cuales imprimen a la política del gobierno una orientación concordante con sus intereses, dentro y fuera del país. En el periodo de la posguerra personajes de esos círculos han ocupado las siguientes posiciones importantes:
Gobierno de Harry S. Truman.¾ El fortalecimiento de los monopolios durante la segunda guerra mundial se reflejó en una verdadera toma del poder por parte de los grandes grupos financieros, que les permitió dar una orientación francamente imperialista a la política exterior del gobierno de los Estados Unidos: Plan Marshall, punto cuarto, guerra de Corea, expansión económica de los monopolios, fueron los rasgos sobresalientes de esa política. Durante la administración de Truman la plutocracia logró ocupar las siguientes posiciones:
Robert A. Lovett, Secretario de la Defensa, miembro de la importante sociedad de inversión de Wall Street, Brown Brothers and Harriman, y consejero de varias grandes corporaciones como la New York Life Insurance Co., del Grupo Morgan.
W. AverelI Harriman, Secretario de Comercio, también de la Brown Brothers and Harriman, y consejero de varias grandes empresas.
John W. Snyder, Secretario del Tesoro, presidente de la gran empresa U. S. Industries y vicepresidente del First National Bank of St. Louis, entre otras.
Clinton P. Anderson, Secretario de Agricultura, socio de la más importante firma algodonera del mundo, la Anderson Clayton and Co.
W. Stuart Symington, Secretario de la Fuerza Aérea, ligado a la gran empresa aeroespacial, la General Dynamics, y presidente de la Emerson Manufacturing Co., de San Luis, Misuri.
Durante el gobierno de Truman se creó la CIA (Oficina Central de Inteligencia) el Consejo Nacional de Seguridad, de acuerdo con la Ley de Seguridad Nacional.
Para el cargo de Alto Comisionado en Alemania se nombró a John Mc Cloy, que dirigía el banco más importante de Nueva York, el Chase, del Grupo Rockefeller.
Gobierno del general Eisenhower.¾¾ El gobierno del general Eisenhower tuvo una participación de la plutocracia en un grado aún mayor que el de Truman, al grado de que se le llamó el "gobierno de los generales", por la decisiva influencia de dos de las más grandes corporaciones, la General Motors y la General Electric, al lado del general Eisenhower. La oligarquía ocupó las siguientes posiciones:
Charles E. Wilson, Secretario de Defensa, presidente de la General Motors, la empresa industrial más importante de los Estados Unidos y del mundo, dominada por el Grupo Du Pont y el Morgan.
Neil H. Mc Elroy, Secretario de Defensa, posterior a Wilson, consejero y alto funcionario de la General Electric y de la Procter and Gamble, ambas del Grupo Morgan.
Donal A. Quarles, Secretario de la Fuerza Aérea, vicepresidente de Bell Telephone Laboratories y presidente de la empresa Sandia Corp., relacionadas con los programas armamentistas.
James H. Douglas, Secretario de la Fuerza Aérea, posterior a Quarles, consejero de la American Airlines y de la Metropolitan Life Insurance, además de miembro del Patronato de la Universidad de Chicago.
John Foster Dulles, Secretario de Estado, miembro del influyente despacho Sulivan and Cromwell, socio de la United Fruit Co., y del Bank of New York.
Lewis L. Strauss, presidente de la Comisión de Energía Atómica, miembro de la sociedad de inversión Khun Loeb and Co., y consejero de los RockefeIler.
Gobierno de John F. Kennedy.¾ Los tres más importantes puestos del gabinete del presidente Kennedy fueron ocupados por destacados miembros de los grandes grupos financieros; controlaron además diversas posiciones importantes relacionadas con la elaboración y puesta en práctica de la política exterior, habiendo tenido una influencia determinante en aventuras imperialistas como la invasión a Cuba (Bahía de Cochinos) y el inicio de la participación de los Estados Unidos en Indochina. Los cargos controlados por la oligarquía durante la administración del presidente Kennedy, fueron las siguientes:
Robert Mc. Namara, Secretario de la Defensa, presidente de la Ford Motor Co., la gran empresa productora de automóviles.
Dean Rusk, Secretario de Estado, que era presidente de la Fundación Rockefeller.
Clarence Douglas Dillon, Secretario del Tesoro, miembro del Consejo del poderoso banco Chase, del Grupo Rockefeller, y miembro de la influyente firma Dillon Reed and Co.
John Mc Cloy, ex presidente del Chase, ex Alto Comisionado en Alemania, fue representante personal del presidente Kennedy para misiones delicadas en Europa. Averell Harriman, que fue Secretario de Comercio en el gobierno de Truman, desempeñó misiones especiales encomendadas por el presidente Kennedy en Laos y otros lugares; general Lucius D. Clay, fue delegado de los Estados Unidos en importantes misiones a Europa, era miembro de la firma Lehmaln Corp., consejero de la General Motors, Continental Can y de la Metropolitan Life Insurance Co., entre otras grandes corporaciones.
Gobierno de Lyndon B. Johnson.¾ La administración de Johnson estuvo fuertemente penetrada por destacados miembros de los grandes grupos financieros y él mismo es miembro de los grupos multimillonarios de Texas. Ello explica el carácter marcadamente imperialista de su gobierno, con sus acciones en Vietnam (ahora puestas a descubierto por la publicación de los documentos secretos del Pentágono), en Cuba, la intervención armada en la República Dominicana, el golpe de Estado en Brasil contra Goulard, y la acción de las “misiones militares” en la América Latina y en muchos otros países del mundo. Durante este gobierno la oligarquía ocupó las siguientes posiciones importantes:
Dean Rusk, Departamento de Estado; Robert Mc Namara, secretario de la Defensa; John F. Connor, del Grupo Morgan, Departamento de Comercio; Clark Clifford, secretario de la Defensa al renunciar Mc Namara, asesor legal de Du Pont y de la General Electric.
Gobierno de Richard M. Nixon.¾ La oligarquía tiene posiciones clave en la administración de Nixon, desde donde decide la política interior y exterior del gobierno norteamericano. Entre las más importantes podemos señalar las siguientes:
David M. Kennedy, secretario del Tesoro (hasta hace poco) es primera figura del poderoso Grupo Chicago, con participación destacada en el Conill, el banco más importante de Chicago, y accionista y consejero en las siguientes grandes empresas: Swift, International Harvester, Commonwealth Edison, Pullman, Abbott Laboratories, Adela Corp., U. S. Gypsum, entre otras.
Maurice Hubert Stans, secretario de Comercio, ligado a la Western Bancorporation que posee 25 bancos con recursos de 11,000 millones de dólares.
David Packard, subsecretario de Defensa, presidente de la Hewlett Packard, director del Comité Asesor Internacional del Chase Manhattan Bank y miembro del Comité Directivo del importante Instituto de Investigaciones Standford.
Charles Appleton Meyer, subsecretario de Estado para Asuntos Latinoamericanos, alto funcionario de la Sears Roebuck, consejero de la United Fruit Co., Gillette, Philadelphia National Bank, Allstate Insurance y Dow Jones Inc.
Además de estos personajes (y de otros que omitimos por razones de espacio) un crecido número de asesores y colaboradores directos del presidente Nixon pertenecen a los grupos oligárquicos, como Peter G. Peterson, de la Bell and Howell, First National Bank de Chicago y la Illinois Bell Telephone, y Peter M. Flanigan, Vicepresidente de la firma Dillon and Reed and Co., que tanta influencia ejerce sobre el gobierno norteamericano.
Continuará...